El turismo de caravana y autocaravana, también llamado itinerante, sigue ganando terreno en el mercado patrio. Con el encarecimiento del precio de la gasolina y otros factores, el presupuesto requerido para viajar en este medio de transporte se ha incrementado, sin que su coste de adquisición haya experimentado cambios significativos, pues comprar caravanas 2 mano continúa siendo una inversión asequible.
Para maximizar el ahorro al viajar en caravana, es aconsejable localizar y beneficiarse de las áreas de pernocta gratuita. Estas zonas de estacionamiento, particularmente abundantes en CC.AA como Galicia, Asturias o Aragón, cuentan con plazas habilitadas para este tipo de vehículos, acceso a servicios básicos (vaciado de aguas grises, por ejemplo) y otros alicientes. No obstante, la estancia se limita a un tiempo límite que conviene respetar.
Los expertos en caravaning también recomiendan circular a velocidades constantes, en marchas poco exigentes para el motor, de forma que el régimen de revoluciones no se dispare. Esto se consigue moderando las aceleraciones y las frenadas al llegar a rotondas, stops y cruces. Para las detenciones en semáforos y los ceda el paso, son útiles los sistemas ‘Start/Stop’ o similar que incorporan los fabricantes más comprometidos con la reducción de emisiones al volante.
Otra forma de economizar el consumo de combustible en este vehículo recreativo es eludir los peajes. La cantidad y coste de estos controles han aumentado en las autopistas españolas, de modo que transitar por ellas supone una mordida para el presupuesto disponible. De ahí que sea más inteligente elegir rutas alternativas. Las carreteras y vías secundarias, además, suelen transcurrir por entornos rurales, más del gusto de este perfil turístico.
Como el resto de conductores, los seguidores del turismo itinerante pueden beneficiarse de las tarjetas de fidelización. Las principales cadenas de gasolineras se sirven de esta estrategia de marketing para atraer y mantener clientes, a cambio de un descuento en los repostajes.
